Cuánto más tiempo estés modificando tus rutinas dietéticas mayor será la probabilidad de éxito. Además, busca alguna actividad física que te genere placer. Aunque no te guste el deporte o no se te dé bien siempre hay opciones. El sexo o el running son dos buenos ejemplos de actividades en las que aun siendo torpe puedes pasar un rato agradable.