Sin embargo, el entorno del San Carlos no carece de espectacularidad paisajística. A sus pies se emplaza el enorme espejo de aguas claras que conforman el Lago Arenal, el más grande del país y fuente de energía para el mismo. Tanto el volcán como el lago están rodeados de una ingente biodiversidad, la que permite una vida privilegiada a unas 2.000 especies de plantas, 120 de mamíferos y unas 300 de aves.
Estos 1.016 km de litoral forjado al margen del misterioso Pacífico guarda tantos secretos como maravillas turísticas a la vista de cualquier viajero.
El litoral del Pacífico encadena más de 100 playas, cada una con una identidad propia determinada por variaciones de forma, color, tipo de arena y temperatura del agua.
En el extremo norte, las arenas grises perla de la Bahía de Salinas reúne uno de los polos más destacados de pesca deportiva de todo el continente americano.