La física también impresiona ya que los neumáticos, la suspensión o la evolución de los frenos cambiarán en función de si conducimos un Mini o un Ferrari. Y así con marcas como Renault, Volkswagen, Audi, BMW, Mercedes, Bentley, Lotus, Aston Martin, RUF, Spyker, Alfa Romeo, Maserati, McLaren, Marussia, GTA, Savage, Caterham, Hennessey, Koenigsegg, Gumpert y Pagani.
Los escenarios incluyen cinco países; Canadá, Chile, Escocia, India y Noruega, cada uno de ellos seleccionados por su típico paisaje, totalmente diferente en cada caso. No es lo mismo conducir sobre la nieve de Noruega (mientras vemos de fondo la aurora boreal, que no falte de nada) que por una carretera seca de la India.
Así que habrá que adaptarse o, literalmente, chocar. El ciclo día/noche está perfectamente conseguido y se podrá configurar la velocidad del mismo. Así podremos disfrutar de los cambios de luz, de la puesta de sol o de la conducción nocturna, momento propicio para alucinar con la iluminación de los salpicaderos o con los reflejos en los cristales, de un realismo escalofriante.