Borda el papel de tonto protagonista, esta vez un triste vendedor de seguros llamado Lester Nygaard, un pusilánime cobarde que apenas sabe como es capaz de sobrevivir a su propia realidad y al berenjenal en el que se ha metido.
El papel de la nueva Frances McDormand, por su parte, era sin duda el más difícil de superar, siquiera igualar, pero hay que reconocer que da la sensación que poco a poco Allison Tolman se va a ir haciendo con su papel intentando diferenciarse de la protagonista de la película y creando un nuevo personaje en conjunto con su colega, el policía bueno y un poco atontando encarnado por Colin Hanks.
Como en la película, si algo abunda en esta serie es la mediocridad, mediocridad en las vidas de cada uno de sus personajes que viven una realidad aburrida en extremo salpicada de violencia y de bajezas morales. Pero evidentemente por encima de todo esto emerge el verdadero gran protagonista de esta brillante serie, un inmenso Billy Bob Thornton, que viene a encarnar en una misma persona los personajes de los matones de la película, los geniales Steve Buscemi y Peter Stormare.