El cómo funciona esto tiene varias explicaciones. Una es que el ayuno estimula la pérdida de grasa, lo cual es beneficioso para esta hormona. Además, la reducción de la insulina resultante del ayuno también ayuda al crecimiento, según demuestran algunos estudios.
Por lo general se entiende como saludable un ayuno de entre 12 y 16 horas diarias.
3. Suplementarse con Arginina
La arginina es un aminoácido de la proteína con beneficios para el sistema inmunitario y para el control de los niveles de azúcar. Como suplemento, la arginina es usada altamente en el deporte y la musculación. Sin embargo, un estudio demostró que usar la arginina sin fines deportivos permite un incremento de la hormona del crecimiento de un modo significativo.
No obstante, todos los estudios que han demostrado la eficiencia de este suplemento requirieron de la ingesta de dosis grandes por parte de los voluntarios, por lo cual no se puede hablar de resultados definitivos, sino de una recomendación con buenas probabilidades de dar fruto.