Si introduces tu mano por debajo de una mesa, con la palma de la mano mirando hacia el suelo, e intentas hacer fuerza sobre dicha mesa, tu dolor crecerá al poner en juego la musculatura lesionada.
Imagina una cuerda que une el codo con el dorso de tu mano. Si tiras de dicha cuerda en dirección al codo, tu mano hará una extensión de muñeca. Si continuamente realizas este gesto los músculos culpables del movimiento se sobrecargarán y la parte del músculo que se une al hueso se irritará y se inflamará provocando dolor y falta de fuerza.
Nuestro cuerpo cuenta con una maquinaria casi perfecta, pero que debemos mantener en buen estado para que el desgaste con los años sea el menor posible. La musculatura de los deportistas que practican tenis o padel con frecuencia, se ve afectada por una mala técnica en el golpeo de revés. Sin embargo, no solamente los jugadores son propensos a sufrir esta patología sino también algunos profesionales cuyo trabajo es desempeñado al empuñar un objeto de forma repetida y prolongada: tatuadores, peluqueros, pintores, informáticos, obreros…