Pero teniendo en cuenta los increíbles recursos mecánicos y tecnológicos que moviliza la industria automotriz de nuestra época; ¿Cuál es el coche de serie más veloz con el que podemos “volar” sobre cuatro ruedas?
Pese a que han tenido que ceder cierta porción de este extrarordinario privilegio, las prodigiosas creaciones del sueco Christian Von Koenigsegg, superan a cualquier otra marca en lo que a velocidad se refiere.
El primer podio de la velocidad llegó en 2005 y le perteneció al Koenigsegg CCR, un biplaza “envenenado” con una potencia de 806 C.V y la insuperable velocidad de 388 km por hora.
Pero luego de tan «desafiante» reconocimiento, algunas marcas no estuvieron dispuestas a que el CCR siga ocupando ese primer puesto eternamente, y mucho menos, si de velocidad se trataba. Una de estas marcas fue Bugati, que con su fugaz Veyron derrotó al Koenigsegg CCR en 2006. Tremendos 1001 C.V imprimieron al Veyron unos infartantes 415 km por hora. El descendiente de aquel icónico Veyron Super Sport que se empezó a vender en 2003 a un millón de euros, se adueño del podio del más veloz.