La apacible (y fumada) existencia de Larry “Doc” Sportello se verá interrumpida cuando su perturbadora y seductora ex novia Shasta, hace acto de presencia en su casa.
[pullquote]Cine negro diferente. Viaje alucinado a un mundo oculto con un excelente Joaquin Phoenix[/pullquote]La desaparición del amante de ésta, un rico magnate inmobiliario, pondrá de nuevo en activo al peculiar detective porrero, adentrándose en una ciudad de Los Angeles plagada de drogas, sexo, falsas apariencias y asuntos turbios…
Paul Thomas Anderson, autor de títulos tales como Boogie Nights, Magnolia o The master, repite con el protagonista de esta última, Joaquin Phoenix, para traernos la adaptación de la novela de Thomas Pynchon, Puro Vicio. Y lo que tenemos es cine negro, visto desde el prisma del director de Pozos de ambición.
Podemos encontrar fácilmente los elementos comunes a cualquier relato noir, esto es, un detective privado con problemas con el alcohol –aquí lo han cambiado por su afición a estar todo el día colocado-, la femme fatale, que en este caso no juega a seducir al protagonista, pues ya les une una previa relación sentimental –y por lo tanto ella ya tiene la batalla ganada- y el caso en apariencia sencillo que conforme avanza va destapando algo más grande, complicado y peligroso.