Si observamos la distribución de la enfermedad, vemos que está presente en las regiones tropicales y subtropicales. Comparando la distribución de la riqueza mundial con la de la enfermedad, podemos observar que es en los países más pobres es donde la malaria tiene más incidencia.
Actualmente, en muchas regiones del mundo está casi erradicada, pero el cambio global va a producir un cambio en su distribución debido al aumento de la temperatura.
Para prevenir la infección, se suelen utilizar redes tratadas con insecticidas o bien fumigando el interior de las casas con productos específicos.
De todos modos, una infección detectada a tiempo se puede curar. Un buen método para curarse es tomarse infusiones de artemisa pues tienen un componente, la artemisina, con actividad anti malaria.