O también Carolina Estévez, que ve cierto machismo en que se quiera normalizar la prostitución: «Todos los que la justificáis sois hombres, ¿por qué será? Lo que debería hacerse es modificar la educación para que no le pareciera a nadie una actividad laboral, ni una actividad siquiera normal. Es una explotación, se mire por donde se mire».
Si hay algo cierto en este complicado debate es que, por más que se comercie con el sexo, como cantaban los Beatles en la canción que da título a este post, hay una cosa que no puede comprarse ni se venderse.
En lo que hubo menos polémica, aunque también diversidad de pareceres, fue en la pregunta sobre si hay que legalizar la marihuana. Sobre este tema nos quedamos con la respuesta de Oscar Jb, que en cierto modo contenta a las dos partes: «Los vicios saben mejor si no están legalizados».
Gracias a la Pregunta Tonta, esta semana hemos sabido que el agua de grifo más rica está en Madrid, según afirman Luis Rubio Fresno o Jorge CG, y que murcianos como Jotai Monti Gomariz o barceloneses como Rosa Rosario creen que lo que sale del grifo en sus ciudades no se puede beber.
