Mucho se ha dicho del café y la hidratación, como que deshidrata el cuerpo, cuando en realidad no hace más que proveerte de agua. Cierto es que seca tu boca, lo cual induce a las personas a pensar que pierdes líquido, pero solo hay que acompañar tu café con un poco de agua, natural o saborizada, y problema resuelto.
También se dice que no es bueno tomar demasiado café al día. Esto es, en parte, cierto. El límite recomendado de ingesta de café al día es de unas tres tazas. Así que, si te quieres tomar uno al despertar, otro a la mitad de la mañana y otro en la tarde, está completamente bien y puedes hacerlo sin ninguna clase de culpa.
Otro mito sobre el café es que puede llegar a causar cáncer. Pero muchos estudios han demostrado lo opuesto (gracias a Dios), que puede reducir las probabilidades de desarrollar cáncer rectal, hepático y cirrosis. ¡Un hurra para el café!