Las auroras boreales de esta atrapante región septentrional generan un espectáculo magnífico y sobrenatural. Y es justamente a fenómenos sobrenaturales a quienes atribuía la mitología noruega esta expresión natural única en el planeta.
Estar en el límite norte de Europa, allí donde los coches de alta gama son reemplazados por trineos y los cuidados perros domésticos por osos alces y renos, no significa que no se pueda vivir el placer y la calidez de una infraestructura perfectamente adaptada a las necesidades del viajero.
Antigua zona de paso entre Oriente y Occidente, superar el reto de salir con vida de la Laponia significó ganarse el título de héroes para muchos exploradores. Hoy todo ha cambiado y los amantes de los viajes en carretera pueden disfrutar del mítico recorrido por la Arctic Highway hasta la mágica Kirkenes. Aunque el invierno sea largo en Kirkenes, el turista sentirá la calidez y hospitalidad del pueblo sami, el más representativo de esta zona del mundo.