Hay épocas en las que nos ponemos ante el espejo y nunca nos vemos bien. Por más que nos arreglemos, algo falla. Muchas veces está relacionado con nuestro estado emocional, por no estar pasando por un buen momento y estar algo bajo de moral.
Ante todo, trata de estar bien por dentro, por descontado. Pero hay otros factores que a priori pueden parecer superficiales, pero que pueden ayudarnos más de lo que creemos. ¿Qué tal si apuestas por un cambio de look?
El primer paso en un cambio de look es centrarte en tu aspecto físico. Empieza por el pelo. Cámbiate el corte, prueba nuevos peinados y encuentra un nuevo estilo con el que te sientas cómodo.
El siguiente paso es la barba. Si eres de los que siempre vas afeitado, prueba de dejarte algo de barba, tu aspecto cambiará completamente y quizás te descubres más atractivo. Y viceversa, claro. Si eres pro-barba, prueba de afeitarte o de cambiar la forma o longitud de tu barba.