El rendimiento se entrena y se cocina
Juan, un chico de 25 años nos explica como últimamente se despierta mucho más cansado, como si necesitara más horas de sueño, a pesar de dormir diariamente unas 9 horas.
Tiramos de la cuerda y nos dice que por la mañana se toma un zumo de naranja comercial, un café con leche y una pieza de bollería industrial. Hasta la hora de la comida no ingiere nada más, suele ir al restaurante más cercano a su trabajo y se pide un menú sencillo. A la cena llega con demasiada hambre, abre el figrorífico y va picando cosas y cosas hasta saciarse.
Levantándote con el pie derecho.
Si quieres levantarte con energía y buen humor y reconoces que tu alimentación seguramente no sea la más adecuada, prueba a acostarte antes para levantarte temprano y dedicar tiempo a tu desayuno. Un buen desayuno y realizar deporte al aire libre a primera hora de la mañana tiene resultados fascinantes a nivel corporal.