El agua micelar es un cosmético conocido desde hace más de veinte años pero que, en los últimos tiempos, se ha convertido en uno de los productos más demandados por hombres y mujeres como solución perfecta para limpiar el rostro en profundidad sin causar la más mínima agresión.
Es agua, sí, pero diferente, y puede resultarte especialmente útil si tienes la piel del rostro sensible y/o con exceso de grasa.
[pullquote]Este agua de características especiales experimenta una pequeña emulsión que puede limpiar el rostro en profundidad[/pullquote]Lo que confiere a este agua sus particulares propiedades es su composición. En su estructura molecular están contenidas unas partículas llamadas micelas, que, (sin querer adentrarnos demasiado en términos químicos), son estructuras bipolares: por un lado, afines al agua (por eso pueden estar ahí) y por otro, opuestas a ella (intentan separarse «arrastrando» consigo todos los compuestos disueltos en el agua).
Aunque suene bastante raro, en la práctica, la explicación no resulta tan compleja. Por la presencia de micelas, este agua de características especiales experimenta una pequeña emulsión que puede limpiar el rostro en profundidad, porque es capaz de disolver determinadas sustancias que serían insolubles en el agua corriente.
