A la hora de afeitarte, el cuello es una de las zonas más conflictivas donde puede producirse una mayor irritación especialmente si tienes la piel sensible.
[pullquote]Acondicionar la piel del cuello antes del afeitado es básico para evitar irritaciones o granitos en la zona[/pullquote]Si quieres eliminar completamente el vello facial sin que queden pelos demás, debes poner el mismo cuidado y empeño en el cuello que en la cara y tomar una serie de precauciones para evitar problemas como rojeces o granitos que pueden derivar en la temida foliculitis de la barba (microinfecciones en el folículo piloso).
Para evitarlo, es importante aplicar bien el jabón o gel de afeitado también por toda el área del cuello para que la piel quede humedecida e hidratada y para que el pelo resulte más flexible y puedas eliminarlo más fácilmente.
Además, si afeitarte el cuello te supone un «calvario» por la irritación posterior, intenta abrir los poros antes de pasar la cuchilla.