Si te encargas de los “papeles” y de la contabilidad de tu propio negocio, o desempeñas esa función para un tercero, es probable que confeccionar una factura convencional sea de lo más habitual, cómodo y automático que realices.
[pullquote]La e-Factura, incluirá obligatoriamente la firma original de la persona que venda el producto o preste el servicio[/pullquote]Pero quizá no tengas en cuenta que, según el sector en el que te desempeñes o para el que trabajes, a partir del 2015, podrías estar obligado a presentar factura electrónica. ¿Sabes lo suficiente sobre la misma?
Partamos de que la emisión de una factura en formato Word o PDF se considera un procedimiento absolutamente legal dentro de nuestro sistema comercial, pero en realidad no lo es al 100%. Las entregamos en mano o las remitimos por correo electrónico, pero ¿hay alguna garantía de origen?
La factura electrónica viene a imponer la tecnología, pero también a tapar estos “puntos oscuros”. La también denominada e-Factura, incluirá obligatoriamente la firma original de la persona que venda el producto o preste el servicio. Así, la factura digital tendrá validez oficial plena.