En lugar de estar sufriendo por un imposible, hay que sacarle ventaja al juego aunque sea como amigos. Porque como dice Alberto Moravia: “La amistad es más fácil y más rara que el amor. Por eso hay que salvarla como sea”
1. Alejarse de lo que hiere
Partiendo de la premisa de que una amistad sincera será mejor que un amor a medias, lo primero que debe hacer un enamorado desahuciado es alejarse de aquello que lo hiere. Antes del bienestar de otros, está el propio y la tormenta que desató Cupido con sus flechas sólo se alivia con la distancia. Siguiendo los consejos de Alejandra Pizarnik: “Necesitas no esperar nada de los demás. Necesitas no traficar con tu dolor. Necesitas orgullo y soledad”.
2. Volverse tan fuerte como el diamante en la soledad
Nietzsche pensaba que el súperhombre debía ser tan fuerte como el diamante. Más que una fortaleza física, él se refería a una espiritual. En especial a una dureza sobre las opiniones de los demás. La voluntad no debe doblegarse a pesar de que el otro diga ‘no quiero ser tu pareja’.