9. Aprenden formas de automotivarse
Uno de los mejores modos de aprender a reconocer el propio estilo de expresar emociones es experimentar con lo que resulta motivador y lo que no. Además, los resultados de este proceso de aprendizaje se pueden aplicar al instante.
10. Pasan tiempo con las personas con las que conectan mejor
Las personas con alta inteligencia emocional no tienen por qué buscar la compañía de las personas que se parezcan a ellas, pero sí con aquellas con las que encajan mejor. Sin embargo, de vez en cuando salen de su zona de confort para abrirse a nuevas amistades, lo cual les permite saber más acerca de ellas mismas.
11. No tienen miedo a conocer a personas nuevas
Las personas con alta inteligencia emocional, a pesar de ser más o menos extravertidas, son capaces de abrirse hacia nuevas experiencias. Eso también influye de forma positiva su faceta social. Son personas que no tienen miedo a conocer otras personas, aunque puedan provenir de mundos distintos al suyo.