En un mundo donde el consumo excesivo nos caracteriza, incluso en el consumo de alimentos, el placer nos hace olvidar la importancia de nuestra digestión. Y es que los restaurantes tratan de abatir a sus competidores, los bufé son algo común y no es raro encontrar una pila absurda de diferentes partes de animales en una sola comida.
Un ejemplo muy simple del tipo de comida al que hacemos alusión podría ser: un cóctel de camarones servido antes de una pechuga de pollo envuelta en tocino.
Podríamos decir que nos alimentos como reyes, pero hay algo de malo en mezclar carnes y que no nos habían dicho.
¿Prefieres un abundante bufé o una buena digestión?
Cualquiera que sea la combinación, consumir diferentes tipos de carne en una sola sesión, como lo hacemos en los bufés, provoca grandes problemas a nuestra digestión. Aquí está el por qué, según el nutricionista Dr. David Friedman, autor del Bestseller “Food Sanity – How to Eat in a World of Fads and Fiction”: