Los carbohidratos, también conocidos como glúcidos, hidratos de carbono o sacáridos, son biomoléculas compuestas por la unión de carbono, hidrógeno y oxígeno. Los carbohidratos son junto a las grasas y las proteínas, los elementos fundamentales que conforman la dieta equilibrada de una persona.
La función principal de los carbohidratos es el aporte energético a nuestro organismo. Los carbohidratos proporcionan la energía que necesita el cuerpo para afrontar esfuerzos físicos y mentales.
Desde un punto de vista dietético y según su composición podemos diferenciar dos tipos de carbohidratos, los simples y los complejos:
1. Carbohidratos simples. Los carbohidratos simples son de fácil asimilación. Esto quiere decir que el cuerpo los digiere rápidamente, generando una secreción inmediata de insulina. Ofrecen la ventaja de que aportan rápidamente energía al organismo. Los carbohidratos simples se dividen a su vez en:
1.1. Monosacáridos. Son los glúcidos más sencillos. Están formados por un único sacárido.
- Glucosa: es el azúcar que el cuerpo humano obtiene tras ingerir ciertos alimentos.
- Galactosa: es el azúcar procedente de los productos lácteos.
- Fructosa: es el azúcar proveniente de las frutas.
1.2. Disacáridos. Están formados por la unión de dos monosacáridos iguales o distintos.
- La lactosa: es el azúcar que se obtiene de la leche.
- La maltosa: o también llamado azúcar de malta porque aparece en los granos de la cebada germinada.
- La sacarosa: o azúcar común, se encuentra en la caña de azúcar, en la remolacha azucarera y en otras sustancias como la miel.
1.3. Oligosacáridos. Son moléculas constituidas por la unión de dos a nueve monosacáridos cíclicos medianteenlaces de tipo glucosídicos.