Un masaje capilar es un método sencillo y agradable de conseguir un pelo más vigoroso y saludable. Los beneficios de esta técnica son múltiples.
Con tus propios dedos y suaves movimientos favoreces la micro circulación del cuero cabelludo fortaleciendo así el folículo piloso, el lugar de nacimiento de cada una de las fibras capilares.
Es una buena idea realizarlo mientras aplicas algún producto específico para tu cabello, por ejemplo una mascarilla nutritiva o una ampolla anticaída, como las de la gama Keravit. Con el masaje, ayudarás a una mejor penetración de los principios activos y conseguirás que los nutrientes «alimenten» las raíces de ese pelo que crecerá con una mayor vitalidad.
¡Anímate a probarlo!
Con el cabello húmedo (tras el lavado o bien tras la aplicación de algún producto) comienza tu masaje por la zona de la nuca. Coloca los pulgares detrás del lóbulo de la oreja y con la yema del resto de los dedos ve subiendo hasta la coronilla mientras realizas pequeños círculos.