No es solo cosa de adolescentes. Aunque los cambios y alteraciones hormonales están relacionadas con su aparición, el acné es en realidad una micro infección, de origen bacteriano, que se produce en el folículo piloso y puede aparecer a cualquier edad.
¿Por qué sale un «grano»? El exceso de grasa, la propia sudoración o incluso las partículas ambientales taponan, en ocasiones, los poros cutáneos convirtiéndolos en el caldo de cultivo perfecto para que determinadas bacterias se instalen, provocando esa característica inflamación y la llegada en masa de los glóbulos blancos para combatir la infección.
La tendencia al acné puede ser algo transitorio (pubertad) o bien derivarse de otras causas como el estrés, la herencia genética e incluso una adecuada alimentación. En cualquier caso, con unos hábitos de higiene adecuados y productos específicos puede combatirse de manera eficaz.
Si tu piel es propensa a los temibles granos deberás extremar el cuidado facial. Se trata de evitar la obstrucción de los poros, por lo que, lavarte la cara por la mañana y por la noche es imprescindible.