Aunque parezca toda una contradicción, el invierno es la estación preferida por los hombres para practicar sexo. No, no es el verano.
No son las altas temperaturas, las vacaciones y la continua exhibición del cuerpo lo que más sube la libido masculina. Y si no, atento a los datos estadísticos: es durante el primer trimestre del año cuando se gestan más embarazos y se diagnostican más enfermedades de transmisión sexual. ¿Por algo será, no?
Un estudio británico realizado por Lovehoney, empresa especializada en sex toys, lo ha constatado. En un experimento con 114 hombres heterosexuales de entre 16 y 53 años, se demostró cómo los cambios de estaciones repercuten también en nuestra vida sexual. Los participantes fueron encuestados cada tres meses, una vez por estación del año, y se les preguntó por el grado de atractivo de ciertas mujeres.
Las fotografías que se les mostraron eran de dos tipos: unas mostraban solamente la cara de las chicas, mientras otras eran exclusivamente de su cuerpo, pechos en primer plano incluidos. Los investigadores hallaron algo sorprendente: mientras las reacciones ante las fotos de cara era la misma durante todo el año, los hombres mostraron un mayor interés por los cuerpos escasos de ropa durante los meses más fríos (diciembre, enero y febrero).