Vale que hay días en los que tener sexo es lo que menos te apetece del mundo pero, por lo menos, ¡cúrrate un poco las excusas que le vas a poner a tu pareja! De lo contrario, tu historia puede acabar como la de este matrimonio, en el que el marido, cansado de tanta negativa por parte de su mujer, se dedicó a recopilar sus evasivas durante dos meses.
La cifra total de noes alcanzó los 18, con justificaciones tan típicas como «estoy cansada» o «mañana tengo que levantarme temprano». No siendo suficiente con escribir solamente los pretextos, el marido hizo hasta un documento de Excel con la fecha de la petición, si acabaron teniendo sexo y, en caso contrario, el porqué de la negativa de su mujer.
Además, junto a las excusas había algunas aclaraciones, como en la que ella alegaba estar intentando mirar una película, pero él aseguraba que se había quedado dormida a los 15 minutos. O que estaba sucia y sudada y necesitaba una ducha pero, sin embargo, no se había duchado hasta la mañana siguiente. O que quería ver un programa de televisión, el cual era una repetición de Friends que había visto mil veces.